«Dara Dai nuk» Sagra
No he sentido jamás la necesidad natural de triunfo, la necesidad de comenzar una carrera, el ser reconocido o aplaudido, no lo he sentido propio jamás en mi vida. No he hecho en cada momento nada más que lo que tenía que hacer y las consecuencias han sido éstas.
Es difícil ser como soy, francamente imposible sin un fin, si consiente he inconscientemente no supiera a quienes y porque, dicen que al nacer no es uno quien elige, pero cada luna amontona en mi cabeza nuevas verdades contrarias a esta idea.
Malos y buenos ratos, siempre tratando de olvidar, destrozando, conociendo, aspirando a entender lo que no. Pero hay cosas que no puedo romper y últimamente lo he tratado casi todo, eso que permanece, eso que ni con toda mi soberbia, terquedad, inteligencia, lo que ni aun con ayuda pude destrozar y resta es su hijo.
Llevo tiempo siendo feliz y de alguna manera haciéndome fuerte, sigo aprendiendo a querer y a pedir, cada vez mas preparado para compartir, de alguna forma soy ustedes y nunca he dejado de ser yo. Muchos aun me consideran una persona madura, quizá por decidir de forma prudente y analítica, pero el cinismo y mis antojos me lo niegan definitivamente, perspectiva supongo.
He vislumbrado algo, familiar, quizá olvidado, la curiosidad ha llamado como siempre primero a mi puerta, es quizá otro capricho, pero intuyo una diferencia y necesito tiempo, sé que es imprudente, innecesario, y asumo también imposible pero necesito pedir un poco mas de tiempo. Es un acto egoísta, si quizá si, no lo se, solo puedo asegurar que es honesto y que usare todo lo que soy, para averiguarlo pronto y volver.
IA 