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Siempre lo supe, sabía que llegaría el momento abrir completamente los ojos ver tan claro las cosas como son y no como creía, los que me conocen saben de lo que hablo, me doy cuenta de lo que antes era obvio pero no lograba ver, me doy cuenta de cuan pequeño es mi circulo, más pequeño que hace unos veranos. Amigos, que rara me suena aun la palabra, casi tan rara como mi amistad, necesitándonos entre nosotros justamente porque no nos necesitamos, la paradoja de la verdadera amistad.

Y caes en cuenta de lo difícil que se vuelve verlos u organizar lo que nunca y la cerveza fría se disfruta cada vez mas siendo la escusa para charlar un rato. Pues salir ya no es tan divertido, es a veces hasta incomodo, muchos añoran esos días de escuela, socializar con la misma gente era el pan de cada día, entonces das cuenta de cuales lazos fueron lo bastante fuertes para sobrevivir al tiempo y añoras, para darte cuenta que no quisieras cambiar eso.

Algunos comprenden que aquellos que los acompañan no son exactamente las mejores personas y a quienes has perdido resultan ser amigos de lo más importante, entonces encuentran lo que siempre han sabido y aun esto muchas veces no basta.

Nos reímos menos, pero cuando lo hacemos es con más ganas y de los ojos resbalan menos lagrimas pero están llevan más dolor

Ya te han roto el corazón, y te has encontrado murmurando que no sirves para el amor, prometes que no volverá a suceder pero tropezamos de nuevo, a veces con la misma piedra y sin embargo deseamos. Son menos fiestas y más bodas, es acaso que nunca me sentiré preparado. Y conocer gente se hace aburrido pues cada vez exigimos más o bien esta ya no es tan interesante y hablar de poesía y amor se torna burdo y te sientes estúpido.

No, yo tengo sueños, quiero esto y quiero aquello, por eso estudie y me esforcé, por eso trabajo, pero estoy cansado y es mucho gasto para mi minúsculo sueldo, pues tengo nuevos compromisos. Esto es lo que hace 10 años pensabas que estarías haciendo. Quizá incursionas en este nuevo mundo pues aplazaste tus estudios o por el contrario los prolongaste y tienes miedo, pues ellos te llevan la delantera.

Te juzgas y comparas de manera rigurosa, ya no son ellos quienes critican y las opiniones son más fuertes y eres menos tolerante. Y hay días donde eres invencible y otros donde solo hay miedos y confusión.

Vemos el pasado y este se aleja, nos preocupa el futuro, hoy más que nunca medimos cada paso pero algo es inevitable seguir avanzando y esta vez con más convicción, hoy recordé algo que siempre he sabido pero que constantemente olvido, soy yo quien lleva la rienda, soy yo quien cuenta esta historia y por fin se lo que en verdad quiero. Gracias.